Vanderbilt, pobre Vanderbilt. Llegó al SPA en septiembre de 2017 a la edad de 1 año. Debe haber sido un año horrible. Tenía huesos rotos no tratados en la espalda, las caderas y la cola. Por su comportamiento, podíamos decir que estaba sufriendo. Mordía a las personas que intentaban acariciarlo y mordía a las personas solo porque tenía ganas. Le recetaron analgésicos y ahora está mucho mejor con gente que conoce, aunque siempre debemos estar atentos a que puede morder en cualquier momento. Le encanta que ciertas personas le acaricien la cabeza y el cuello y le encanta ver pasar el día desde su soleada cama. Al adoptar virtualmente a Vanderbilt, ayudará al SPA a brindarle el refugio seguro, los alimentos, los medicamentos y el amor que se merece.

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Dale un poco de amor a Vanderbilt en el SPA cualquier día, de lunes a sábado, entre las 11 y las 2.

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